El pasado 8 de marzo, la Superintendencia Nacional de Salud tomó una decisión crucial frente a la crisis de desabastecimiento de medicamentos en varios puntos de dispensación del país, imponiendo una medida cautelar a Audifarma.
Uno de los casos más preocupantes se registró en Quibdó, Chocó , donde a pesar de que el contrato con la Nueva EPS sigue vigente, las estanterías de medicamentos mostraron un vacío alarmante. Entre los productos faltantes se incluyen medicamentos esenciales, como el acetaminofén, y tratamientos de alto costo para enfermedades graves como el cáncer.
Ante esta situación, la Superintendencia adoptó una medida cautelar con el fin de salvaguardar el derecho fundamental a la salud de los usuarios . En el documento emitido, se ordenó la cesación provisional de las acciones que ponen en riesgo la vida o integridad física de los afiliados al Sistema General de Seguridad Social en Salud. Esta medida busca garantizar la continuidad en la dispensación de tecnologías en salud de forma oportuna, continua y de calidad.
Entre las acciones especificadas, la Superintendencia destacó la suspensión de los cierres de los establecimientos farmacéuticos que prestan servicio a los afiliados de la Nueva EPS por un período inicial de dos meses, prorrogable según las circunstancias. Además, se instruyó a Audifarma a resolver las entregas pendientes de medicamentos y a informar con antelación cualquier cierre de establecimiento a las autoridades competentes.
Es relevante resaltar que esta medida difiere de la impuesta anteriormente, la cual tenía un carácter sancionatorio. La nueva medida es de naturaleza administrativa y preventiva, con el objetivo de asegurar que no haya interrupciones en el servicio durante el proceso de finalización del vínculo contractual entre Audifarma y la Nueva EPS , y evitar que los usuarios sean afectados por esta transición.
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