Este ha sido un año muy duro para el cantante español David Bisbal. Gran parte de sus preocupaciones se han debido al estado de salud de su padre, sobre el que hasta hace muy poco ha querido hablar.
Su otro gran dolor ha sido su hermano mayor, José María Ferrer, quien el pasado mes de abril fue reportado como desaparecido por Lupe, su mujer, en Almería. La Guardia Civil logró localizarlo dando por concluida su búsqueda pero no su calvario.
La situación dio pie a múltiples especulaciones y en su momento el intérprete de "Bulerías" se pronunció al respecto agradeciendo al público y a sus fans la ayuda prestada para localizar a su hermano, de 55 años.
El hermetismo prosiguió hasta ahora que Ferrer ha concedido una entrevista revelando que estuvo ingresado en el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo. El primogénito de la familia Bisbal informó que fue dado de alta, pero lamentablemente ha quedado en silla de ruedas debido a un grave trauma.
"Me han dado recientemente el alta de este magnífico hospital donde he estado ingresado casi cinco meses por una lesión medular", explicó Ferre al portal Informalia.
Al confirmar que requiere de una silla de ruedas para moverse, el hermano mayor de Bisbal dijo valiente: "Me han enseñado a vivir con ella; Se puede vivir así, de hecho, estoy viviendo así y soy completamente autosuficiente, no necesito ayuda de nadie".
El vínculo que une a Bisbal con sus hermanos, particularmente con José María, es muy fuerte, pues él fue su road manager por un tiempo e incluso abandonó su empleo en el sector de salud para apoyar a su hermano tras su salto a la fama en Operación Triunfo:
En la entrevista Ferrer reveló que su estado anímico se vio fuertemente afectado durante su estancia en el centro de especialidades.
"Llegué con una depresión bastante severa, porque esta lesión es difícil de aceptar", afirmó. "Pero una vez aceptada y asimilada, ¡decidí tirar para delante! Estoy muy feliz y con muchas ganas de disfrutar de la vida". Le deseamos pronta recuperación.
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