Cambian las formas de obtener la libreta militar: ya existe una nueva opción
- Tolima Stereo
- hace 12 horas
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Colombia dio un giro importante en la manera en que los jóvenes pueden definir su situación militar; luego de que la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres presentara el primer grupo de 60 jóvenes que prestarán su servicio desarrollando actividades de gestión del riesgo y cambio climático dentro del programa Servicio Social para la Paz, una alternativa que transforma el sentido del servicio militar tradicional y abre un camino más cercano al trabajo comunitario.
Esta modalidad permite que los participantes aporten a la comprensión del riesgo desde sus territorios, acompañando a instituciones como la UNGRD, la Cruz Roja Colombiana, la Defensa Civil, el Servicio Geológico Colombiano, Parques Nacionales Naturales y el IDIGER; con el fin de integrar a la juventud en tareas relacionadas con la prevención y la preparación ante desastres, así como en procesos educativos que fortalezcan la resiliencia comunitaria en distintas regiones del país.
Durante su participación, los jóvenes se sumarán a procesos de educación sobre conocimiento del riesgo, orientación a las comunidades en alertas tempranas, apoyo al monitoreo comunitario y fortalecimiento de la Gestión Integral del Riesgo Escolar. También acompañarán actividades en espacios pedagógicos como el Museo MAGMA, con el objetivo de promover una cultura de prevención que consolide capacidades locales en situaciones de emergencia o eventos climáticos.
El Gobierno señala que esta propuesta está inscrita dentro de la política de paz total y se desprende de los acuerdos de 2016, buscando que los jóvenes desarrollen su vocación mientras contribuyen al fortalecimiento social; por lo que la iniciativa cuenta con 11 líneas de acción que abarcan desde alfabetización digital, trabajo con víctimas y protección ambiental hasta promoción de políticas de paz, reforma rural integral y protección de personas vulnerables.
Así mismo, el despliegue territorial del programa refleja la intención de llevar estas capacidades a múltiples zonas del país; dado que los participantes estarán en ciudades como Sincelejo, Santa Marta, Riohacha, Valledupar, Popayán, Bogotá, Cali, Medellín y Cartagena, además de municipios como San Sebastián de Mariquita, Puracé, Miranda, Ocaña, Tierralta, Uribia, Funza, El Bagre y La Uribe.
Al finalizar el proceso, los jóvenes recibirán un certificado equivalente a la libreta militar; el cual será válido para cualquier trámite posterior y permitirá que quienes participaron accedan a oportunidades laborales sin obstáculos por su situación militar. Adicionalmente, se entregará una certificación de primer empleo que reconoce la experiencia adquirida durante el servicio, lo que contribuye a fortalecer sus perfiles profesionales.
También recibirán un auxilio económico mensual equivalente al 80% de lo que percibe un soldado regular, lo que representa un apoyo mientras desarrollan su labor.
A la fecha, más de 400 jóvenes conforman la primera generación del Servicio Social para la Paz; dato que pone sobre la mesa el interés por alternativas que permitan combinar responsabilidad social, experiencia laboral y cumplimiento del deber militar; ya que para muchos, esta opción representa un camino que suma a la construcción de paz territorial y a la consolidación de capacidades comunitarias frente al riesgo de desastres, al tiempo que evita la obligatoriedad del servicio militar tradicional.
Libreta militar por el modo tradicional
En paralelo a estas transformaciones, los jóvenes que no accedan a esta modalidad deben continuar el proceso habitual para obtener la libreta militar, que inicia con la inscripción en www.libretamilitar.mil.co, donde es necesario cargar documentos como la cédula ampliada, el registro civil y las cédulas de los padres cuando se es menor de veinticinco años.
Tras este registro, el sistema envía una citación para presentar exámenes psicofísicos en el distrito militar asignado y de acuerdo con los resultados, se define si el joven es apto o no apto para el servicio.
En caso de ser apto, presta servicio militar en cualquiera de sus modalidades. Si no lo es, la autoridad realiza la liquidación correspondiente para el pago de la cuota de compensación militar y posteriormente se entrega la libreta de segunda clase. Este proceso estándar sigue siendo obligatorio para quienes no se vinculen a programas como el Servicio Social para la Paz, pero ahora convive con alternativas que fomentan la participación social y el desarrollo comunitario.







