No hay nada más frustrante que rociarte tu fragancia favorita por la mañana y notar que, apenas unas horas después, ha desaparecido por completo. Si te ha pasado, no estás solo. La duración del perfume no solo depende de la calidad del producto, sino también de cómo y dónde lo aplicas.
Los expertos en perfumería han revelado que ciertas zonas del cuerpo funcionan como puntos estratégicos para prolongar la fragancia.
Según Emmir Milano, reconocida casa de perfumería de lujo, cada persona tiene una química corporal única que interactúa con las fragancias de manera diferente, debido a que el pH de la piel varía según factores como la alimentación, el clima y el nivel de hidratación. En promedio, la piel humana tiene un pH que oscila entre 4.5 y 6.5.
“Si la piel tiene un pH más ácido, es posible que las fragancias frescas y cítricas se volatilicen más rápido, por lo que sugerimos optar por aromas con bases más cálidas y amaderadas, que aportan mayor fijación. Por otro lado, si la piel es más alcalina, los perfumes con notas florales, orientales o especiadas pueden ofrecer un desarrollo más duradero y equilibrado. Sin embargo, nuestros perfumes, por ejemplo, están diseñados para brindar perfiles olfativos versátiles capaces de adaptarse a diferentes tipos de piel”, afirma Alejandra Morales, Brand Manager de la marca.
Muñecas
Uno de los lugares más clásicos y efectivos. La calidez de esta zona ayuda a que el perfume se difunda de manera constante. ¡Ojo! No frotes tus muñecas después de aplicar el perfume, ya que esto puede alterar la composición de la fragancia y hacer que se evapore más rápido.
Cuello y detrás de las orejas
Son puntos de alta temperatura y cercanos al rostro, lo que facilita que tu aroma se perciba de manera sutil pero constante. Ideal para quienes buscan dejar una impresión inolvidable.
Pliegue interno de los codos
Un lugar estratégico que, con el movimiento natural de los brazos, libera poco a poco la fragancia a lo largo del día.
Detrás de las rodillas
Sí, aunque suene poco convencional, esta zona genera calor y permite que el perfume se eleve con el movimiento, creando un efecto envolvente.
Cabello y ropa
Aunque los perfumes están diseñados para aplicarse en la piel, una ligera bruma sobre el cabello o la ropa puede ayudar a que el aroma se mantenga por más tiempo. Solo asegúrate de no usarlo directamente sobre el cabello seco, ya que el alcohol puede resecarlo.
Otros factores que influyen en la duración del perfume
Hidratación de la piel
Una piel bien hidratada retiene mejor las fragancias. Aplicar una crema sin aroma antes del perfume puede mejorar su fijación.
pH de la piel
Cada persona tiene una química corporal única que influye en cómo se desarrolla el perfume. Si tienes un pH más ácido, las fragancias frescas pueden evaporarse más rápido, por lo que podrías optar por aromas más intensos y amaderados.
Clima y temperatura
En días fríos, los perfumes tienden a durar más, mientras que el calor acelera su evaporación. Por eso, en verano es recomendable optar por fragancias más intensas o reaplicar a lo largo del día.
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