
Molestias como indigestión o dolor abdominal son comunes y, en muchos casos, se deben a alimentos en mal estado.
Sin embargo, estos síntomas pueden ser una alerta temprana de cáncer de estómago, un padecimiento que requiere atención inmediata según especialistas.
El cáncer gástrico se origina en las células del revestimiento del estómago, un órgano ubicado en la parte superior izquierda del abdomen, cuya función principal es descomponer los alimentos para la absorción de nutrientes.
De acuerdo con el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, aunque no hay causas exactas, existen factores que pueden aumentar el riesgo, como el consumo excesivo de alcohol, el tabaquismo y la infección por Helicobacter pylori.
Señales tempranas que no debe ignorar
El cáncer de estómago es difícil de detectar en sus etapas iniciales, ya que sus síntomas pueden parecer inofensivos o similares a otras afecciones. Los indicios más comunes en las primeras etapas son:
Indigestión o malestar frecuente.
Sensación de hinchazón tras comer.
Ardor persistente en el estómago.
Náuseas sin causa evidente.
Pérdida de apetito.
En casos más avanzados, las señales pueden volverse más graves, como:
Dolor abdominal persistente.
Sangre en las heces.
Vómitos recurrentes.
Acumulación de líquido en el abdomen (ascitis).
Dificultad para tragar alimentos.
Pérdida de peso sin una causa clara.
La Clínica Mayo señala que estos síntomas podrían estar relacionados con daños en el revestimiento interno del estómago, provocados por factores como el reflujo ácido crónico o una dieta con alto contenido de sal.
En caso de síntomas persistentes, es importante consultar a un especialista, como un gastroenterólogo, quien podrá realizar pruebas diagnósticas como una endoscopía para determinar el origen de las molestias.
Cuando el cáncer de estómago se detecta a tiempo, las probabilidades de recuperación aumentan. Sin embargo, si el diagnóstico se realiza en etapas avanzadas, las opciones de tratamiento son más limitadas.
El manejo de esta enfermedad puede incluir procedimientos como:
Cirugía: la más común es la gastrectomía, que implica la extirpación total o parcial del estómago.
Radioterapia y quimioterapia.
Terapias dirigidas e inmunoterapia, dependiendo del estadio del cáncer.
Nunca ignore las señales que su cuerpo le envía. Si las molestias son constantes y no parecen tener una causa aparente, consulte a su médico. Un diagnóstico temprano puede marcar la diferencia en el tratamiento y el pronóstico.
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