
El desempleo en Colombia pasó del 14.6%, en enero del 2022, al 13.7%, en enero del 2023. A diferencia de lo que ocurrió el año pasado, los grandes protagonistas no se registraron en las grandes ciudades, sino en los pequeños municipios y en las zonas rurales del país. Así lo informó el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane.
El principal aporte a la reducción del desempleo de hecho fueron las ‘otras cabeceras’ que representaron cerca de un 70% de la disminución.
El reporte del Dane mostró que se crearon 796.000 nuevas vacantes en el país y que el crecimiento del empleo fue más acelerado en los pequeños municipios y en el campo que en las grandes ciudades. El sector protagonista en esta oportunidad fue el turismo, que creó 336.000 plazas.
En contraste, se perdieron empleos en sectores como la administración pública, que redujo 214.000 cupos y la construcción, que recortó 148.000.
En cuanto a género, a nivel nacional la tasa de ocupación para hombres aumentó de 67.1 % en enero de 2022, a 68.0 % en el mes pasado. En el caso de las mujeres, el aumento se dio de un 40.7 % a 42.5 %.
“Para el primer mes de 2023, la población ocupada del país tuvo un aumento anual de cerca de 796.000 personas. Las mujeres lideraron la recuperación, con 476.000 nuevas plazas. La población desocupada registró una caída del 3,9 %”, mencionó la entidad.
En consecuencia, los tres gremios que tuvieron un aumento significativo son alojamiento y servicios de comida, actividades profesionales y actividades artísticas. Mientras que en las ramas de construcción y administración pública hubo pérdidas de ocupación.
Las ciudades con las más altas tasas de desempleo en el periodo de análisis fueron en su orden: Quibdó con 28.6%, Riohacha 17,9% e Ibagué con un 17.7%. En contraste las de menor desocupación se encuentran Santa Marta 9.3%, Medellín 9.4% y Manizales 9.7%.
La informalidad presentó un incremento de 0.9 puntos porcentuales al pasar del 57.1% al 58% y entre los jóvenes la tasa de desempleo se redujo del 20.6 al 18,2%
Finalmente, la población ocupada pasó de 20,6 millones a 21,4 millones de personas en todo el país; mientras que aquellos que no se encuentran trabajando pasaron de 14,5 millones a 14,3 millones de personas.