
La papada es la acumulación de grasa o el exceso de piel debajo de la barbilla, que se extiende por el cuello, justo debajo de la mandíbula y el mentón. Su origen puede ser congénito o puede deberse a cambios hormonales y al sobrepeso y la obesidad.
Aunque estos factores incrementan la probabilidad y la gravedad de la papada, una de las principales causas es el envejecimiento, según el sitio web especializado Medical News Today.
Hay ejercicios específicos que permiten quemar, poco a poco, el exceso de grasa subcutánea que cuelga en esa zona del cuello, y devolverle al rostro una apariencia más juvenil. Trabajar los músculos del cuello y la cara podría ayudar a deshacerse de la papada. Estos son algunos:
1. La vuelta al mundo (calentamiento)
Como con cualquier rutina de ejercicios, es importante calentar los músculos para evitar lesiones. Para calentar el cuello, gire suavemente la cabeza hacia adelante y hacia abajo y luego hacia atrás y hacia arriba con un movimiento circular en el sentido de las agujas del reloj. Después de algunas rotaciones, invierta la dirección.
El mismo movimiento circular se utiliza para estirar la mandíbula. Extienda suavemente la mandíbula hacia la izquierda, luego hacia adelante, luego hacia la derecha y luego hacia atrás, manteniendo cada posición durante uno o dos segundos. Ahora los músculos están calientes y listos para el ejercicio.
2. Silbato en el techo
Siéntese con la espalda recta y los hombros relajados. Incline la cabeza hacia atrás para mirar al techo. Desde esta posición, cierre los labios en la posición utilizada mientras silba. Los labios deben estar relajados pero lo suficientemente apretados para sentir una contracción en ambos lados del cuello.
Mantenga esta posición durante 10 a 20 segundos dependiendo del nivel de comodidad de la persona. Diez repeticiones de este ejercicio suelen ser suficientes para una sesión.
3. Bese el cielo
Este ejercicio es similar al anterior, con algunas diferencias.
Párese derecho y alto con los brazos y los hombros sueltos y relajados. Incline la cabeza hacia atrás para mirar al techo. Frunza los labios e intenta besar el cielo, alejándolos lo más posible de la cara.
Cuando se hace correctamente, los músculos del cuello y la barbilla deben sentirse flexionados pero cómodos. Mantenga esta posición durante 5 a 20 segundos y luego relájese. Repita de 10 a 15 veces por serie.
4. El apretón de pelota
Para los ejercicios de cuello, puede ser útil tener una pelota en algún lugar cerca del escritorio, la cama o en un lugar donde la persona vaya a hacer los ejercicios. El tamaño debe ajustarse a la comodidad personal y debe ser fácil de apretar entre la barbilla y la parte superior del pecho.
La compresión de la pelota se hace mejor desde una posición sentada con la espalda recta y los hombros relajados.
Coloque la pelota debajo de la barbilla y empuje hacia abajo contra la pelota con un movimiento constante y firme. Esto se puede repetir de 10 a 30 veces durante cada sesión.
5. Haga pucheros
Otra forma eficaz de trabajar los músculos de la barbilla y el cuello es hacer un estiramiento con pucheros.
De pie o sentado, saque el labio inferior lo más que pueda para formar una cara de puchero. Mantén la posición durante 3 segundos. Con el labio aún en completo puchero, use los músculos del cuello para inclinar la barbilla hacia el pecho sin mover la parte superior de la espalda.
Mantenga esta posición durante 3 segundos. Relaje los músculos y empiece de nuevo. Repita de 10 a 20 veces o hasta que el cuello sienta el ejercicio.
6. Mastique chicle
Masticar chicle puede no parece mucho, pero puede ser útil para las personas que buscan deshacerse de la papada de varias maneras.
Un estudio de Trusted Source publicado en la revista Appetite encontró que las personas que mascan chicle después de una comida pueden sentirse más satisfechas con lo que han comido. Esto los hace menos propensos a buscar refrigerios adicionales. Masticar chicle puede ayudar a las personas que están perdiendo peso a reducir la cantidad de calorías en su dieta.
Se trata de un ejercicio menor para los músculos de la cara, especialmente la mandíbula. Masticar chicle regularmente puede contribuir a una pérdida general de grasa en la barbilla, aunque probablemente no hará mucho por sí solo.
7. El bostezo del león
El objetivo de este ejercicio es abrir bien la boca mientras se saca la lengua lo más posible, como un león que bosteza. Puede ser un gran ejercicio para fortalecer muchos músculos en la barbilla, el cuello y la cara.
Siéntese o párese con una postura relajada. Abra la boca lo más que pueda mientras extiende la lengua tanto como sea posible.
Cuando se hace correctamente, los músculos del cuello, la barbilla y la mandíbula deben tensarse.
Saque la lengua durante 10 segundos y relájese. Repita este proceso 10 veces y pase a otro ejercicio.
Refuerce con otros cuidados
Para reforzar los ejercicios, no olvide incluir siempre el cuello en sus rutinas diarias de belleza.
Además, tenga en cuenta que el exceso de sal (sodio) y grasas saturadas contribuyen con el aumento de peso y la retención de líquidos que pueden aumentar el tamaño de la papada. Así que aliméntese de manera más saludable.
Beba un mínimo de un litro y medio de agua u otros líquidos al día y consuma frutas, verduras, fibras, pescado, lácteos, leches bajas en grasa y reduzca la ingesta de panes y productos de pastelería. Controle, además, la cantidad de sal y azúcar refinada en sus comidas.
Con información del portal de noticias de salud Medical News Today