Hace unos días se conocieron, por parte del Dane, las “cuentas nacionales trimestrales por sector institucional en serie”, con las cuales se analiza la evolución de la economía en términos de ingreso, consumo, ahorro e inversión bajo la medición de los flujos financieros y no financieros; para tener una fotografía completa de este tema.
En este informe, que según los expertos también estudia el comportamiento de cada sector de la economía en el tiempo y las interrelaciones que existen entre ellos, es crucial porque permite comprender mejor la salud general de la economía, identificar tendencias y patrones importantes, y formular políticas económicas más efectivas para promover el crecimiento y la estabilidad económica.
hora bien, en el más reciente reporte hubo un punto que llamó la atención a los expertos, partiendo por el exdirector del Dane y hoy concejal de Bogotá, Juan Daniel Oviedo, quien se enfocó en el ahorro para mostrar una de las aristas desde la que la desaceleración está golpeando con fuerza la economía en los hogares.
Por medio de sus redes sociales, es experto en estadística y analítica de datos, arrancó hablando del ahorro bruto, el cual quedó en su nivel más bajo de los últimos 60 años, superando incluso los tiempos de pandemia.
Para entender mejor la magnitud del hecho, Oviedo explicó que este indicador representa la parte del ingreso disponible del país que no se gasta en bienes y servicios de consumo final, permitiendo con estos recursos la adquisición de activos, como inversión, por parte de los agentes económicos.
“Medido como puntos de PIB (es decir, monedas de una alcancía), el ahorro bruto de 2023 fue de 10.1 puntos del PIB, el valor más bajo desde 1960, según medidas aproximadas del Banco Mundial”, dijo el exdirector del Dane.
Ahondando en su ejemplo, Juan Daniel Oviedo explicó que “si la alcancía del ahorro de Colombia tenía 16 monedas (aprox.) en 2019 (pre-pandemia), en 2023 sólo había 10. Entre 2019 y 2023, los hogares perdimos casi dos monedas, producto del crecimiento acelerado en el consumo en la recuperación después de la pandemia”.
También indicó que si bien hubo una ligera mejora en la capacidad de ahorro de los hogares en 2023 en comparación con 2022, esta se debe atribuir a una reducción en el consumo debido a las altas tasas de interés y la desaceleración económica, resaltando que es crucial convertir ese ahorro en inversión en vivienda a través de políticas efectivas del gobierno y los alcaldes.
“De las 10 monedas de ahorro (puntos porcentuales del PIB), un poco más de 7 son de las empresas. Esto no es malo, al contrario, refleja el músculo de las empresas a la hora de poder convertir ese ahorro en inversión. Sin embargo, se resalta la caída tan fuerte del ahorro bruto de las empresas entre 2022 y 2023 pues pasaron de tener más de 14 monedas a un poco más de 7”, agregó.
Respecto a las causas para que esto pasara, el analista explicó que la incertidumbre del discurso de política económica del gobierno nacional y las altas tasas de interés, que también debilitaron la demanda interna, llevaron a las empresas a reducir en casi la mitad su capacidad de ahorro en 2023, la más baja de la historia reciente.
“Por último, el incremento acelerado del recaudo tributario en 2023 permitió que en vez de sacarnos por derecho 3 monedas de ahorro para financiar el déficit del gobierno en 2022, solo se tuviera que sacar una. No olvide, que el gobierno no ha hecho dieta con austeridad del gasto sino que se vieron los efectos de sus medidas tributarias aprobadas en 2022”, explicó Oviedo.
El hoy concejal cerró diciendo que la caída del ahorro bruto debe ser un llamado a la unión para generar incentivos que impulsen la inversión privada tanto de empresas como de hogares, resaltando que esto requiere un clima de confianza y coherencia en las políticas públicas, enfocándose en medidas concretas que fomenten la inversión y el desarrollo económico.
Asimismo, destacó la importancia de evitar distracciones políticas e ideológicas que desvíen la atención de las prioridades fundamentales de la sociedad, instando a trabajar juntos para fortalecer la economía y mejorar las condiciones de vida de todos los ciudadanos.
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